Los efectos del castigo físico es un tema importante del cual se han realizado investigaciones al respecto. Un gran porcentaje de los análisis arrojan que este tipo de sanción puede llegar a causar mas problemas que beneficios en los niños. Si reflexionamos sobre que resultados se obtiene cuando se aplica este tipo de sanción, nos encontramos con la realidad de que eso no ha resuelto nada ni a cambiado la situación problema (por ejemplo si el niño saca una calificación baja, golpeándolo no cambiamos la nota ni retrocedemos al pasado para que rinda mejor el examen), por el contrario solo tendría efectos negativos tanto en los pequeño como en los padres.
Cuando un niño tiene un comportamiento difícil es importante averiguar cuales son las razones que pueden estar generando eso. Esto ayudará a poder encontrar alternativas de solución opuestas a la sanción física.
Consecuencias del castigo físico en los niños
- Genera rencor y sentimientos de tristeza, puede generar ideas de querer alejarse del hogar. En consulta podremos escuchar cosas como «Prefiero vivir con mi abuela porque ella es buena»
- Se sienten solos y abandonados pues quien debería protegerlo le infunde miedo.
- Termina fomentando más violencia. El niño aprende que una forma de solucionar los problemas es a través de la violencia.
- Paraliza la iniciativa del niño, bloqueando su comportamiento y limitando su capacidad para resolver problemas.
- Muchos creen que los castigos físicos los hacen más fuertes y preparados para la vida, sin embargo puede terminar convirtiéndoles en victimas o victimarios de violencia familiar.
- Daña su autoestima. Genera sensación de minusvalía y promueve expectativas negativas respecto a sí mismo.
- Interfiere en su aprendizaje.
- El vinculo con los padres se se mueve dentro del miedo y la falta de confianza para expresar sus sentimientos.
- Cometer un error lo toman como algo que no se pueden permitir
- Pueden ser perfeccionistas o autoexigentes consigo mismos.
- No se aprende a cooperar con las figuras de autoridad, se aprende a someterse a las normas o a transgredirlas.
- Se puede ocasionar daños físicos graves cuando al padre se le pasa de las manos el castigo.
Alternativas al castigo físico
- Usar palabras que expresen con claridad nuestros sentimientos sin atacar al niño. Pueden usarse frases cortas pero que expresen firmeza «Estoy enojado(a)». Podemos decir cómo nos sentimos, pero sin necesidad de insistir en lo malo que es el niño.
- Si se siente muy enojado y no quiere recurrir al castigo físico puede alejarse de la situación para poder calmarse y pensar en otras alternativas
- Hacer las paces cuando la tormenta ha pasado. Los padres pueden volver a mostrarse cariñosos y hacer saber a sus hijos que su enfado, por muy fuerte que parezca, es pasajero.
